miércoles, 1 de septiembre de 2010



Si mi amor, eres una autentica reina, la reina de nuestra casa y nuestros corazones. Hace unos días llegamos de China, de recoger a tu hermanita.
Ha sido un viaje maravilloso, y tu has contribuido a que fuera maravilloso, no por esto ha dejado de ser durillo en muchos momentos. Para llegar a Nanchang, nuestro primer destino, pasamos treinta y tantas horas de viaje, y pasamos por un coche, tres aviones y un autobús para llegar al hotel y descansar. Pero tú no te has quejado de nada. Una vez allí, has seguido aguantando el calor sofocante, el mal comer, los madrugones y las siestas en el carro del que ya te sales, porque estas grandisima, o eso me parece a mi ahora, con lo pequeñita que me parecías hace unas semanas. Jijiji.
En Nanchang has sido toda una atracción. Por donde ibas la gente te miraba, se paraban y se hacían fotos contigo, si si, como si fueras famosa. En alguna ocasión llego a ser agobiante. Te decían, según el guía, claro, que parecías una muñeca, que les encantaba tu pelo, que eras linda. Fíjate, lo mismo que pienso yo.
Tu carácter abierto ha favorecido el que te encontraras allí como en casa, porque no tenias problema en ponerte a jugar con otros niños, aunque no los entendierais, enseguida conectaste, como nosotros, con Javier, Cristina, Fernando y Luís, el guía al que cuando lo veías le decías, “hola muñeco”, porque el te decía muñeca. Cuando estábamos fuera de la habitación casi no nos enterábamos de ti, porque menos con nosotros siempre andabas con unos y con otros.
Raro es el día que no me preguntes por ellos, y yo para abreviar contesto que están en Madrid y tu, y por que???, porque viven allí, y por que?? , y yo donde?? En Elda, y por que?? (estas en la fase, y por que??).
También has nombrado a Sally, tu amiga china que se prendo de ti desde el primer día y que te regalo un precioso traje chino.
Ha sido una experiencia única para ti, la pena es que no la recordaras cuando seas mayor, pero era un gusto verte hecha toda una políglota, saludando tanto en chino como en ingles, diciendo thank you, good morning, one, two…. y alguna que otra palabra mas.
Verte observar como oraban en el tempo y ponerte al lado y hacer lo mismo, y la gente, encantada, ayudándote a poner las manos para rezar.
Como toda la comida picaba tanto, y no parabas de oírnos decir , uff esto pica, tu ya, aunque fuera agua, nos preguntabas, pica??.
Y recibir a tu hermana fue sin duda la mejor vivencia, estabas contenta, con cara de felicidad, como nosotros, como si fueras adulta y entendieras todo este proceso, como si fueras consciente de todo.
Creo que nos has regalado este viaje, como si supieras lo importante que era este viaje en nuestras vidas y hubieses dicho, vamos a portarnos bien y a disfrutarlo.
Así que, gracias.
Te quiero REINA DE SHANGHAY (asi te nombro Fernando en el edificio de la Barby de Shanghay)